viernes, 3 de julio de 2009

Semana del Orgullo Gay



El Día Internacional del Orgullo LGBT (lesbiana, gay, bisexual y transgénero), también conocido como Día del Orgullo Gay o simplemente Orgullo Gay (en inglés, gay pride) es una serie de eventos que cada año los colectivos homosexuales celebran de forma pública para instar por la tolerancia y la igualdad de los gays, lesbianas, bisexuales y transexuales. Tal fiesta tiene lugar en torno al 28 de junio o bien el primer sábado posterior al 28 de junio, fecha en que se conmemoran los disturbios de Stonewall (Nueva York, EE. UU., 1969), que marcan el inicio de la liberación homosexual. En algunos países la fecha original puede cambiar en caso de coincidencia con otros eventos locales muy importantes (eventos masivos, elecciones políticas o posibilidades de leyes trascendentes para los homosexuales).

La noción básica del «orgullo gay» consiste en que ninguna persona debe avergonzarse de lo que es, cualquiera sea su sexo u orientación sexual. El término escogido («orgullo»), tiene probablemente más sentido, desde un punto de vista filológico, en inglés que en español. En efecto, la idea que parece transmitir este concepto es más bien la de una dignidad intrínseca de cada ser humano, que no debe verse afectada por su conducta ni orientación sexuales. En tal sentido, la traducción más correcta debería ser dignidad gay.

La celebración se desarrolla comúnmente con coloridas «marchas del orgullo» (en inglés «pride parades», en francés «marches des fiertés») que coinciden, en el hemisferio norte, con el inicio del verano. Los símbolos del orgullo gay (la bandera con los colores del arco iris y los triángulos rosas), se exhiben en abundancia en estas fiestas. En las celebraciones suele darse cabida a actividades que exceden del marco del jolgorio: reivindicaciones sociales o políticas que identifican a los colectivos participantes. Una vez superadas las leyes consideradas más discriminatorias en su contra para los homosexuales, la creación del matrimonios, o el establecimiento de la homoparentalidad (adopción de hijos por homosexuales), son temas recurrentes en las fiestas del orgullo contemporáneas, que en los últimos años, con la cada vez mayor fuerza del movimiento homosexual, han ido politizándose fuertemente, convirtiéndose en un instrumento de presión política a los gobiernos en favor de los colectivos homosexuales y contando con una fuerte participación de grupos de izquierda, que han asumido las demandas gay como propias.

OPOSICION DENTRO DEL COLECTIVO GAY

Dentro de la comunidad homosexual algunos rechazan la noción de orgullo gay, pues perciben en ella un énfasis excesivo en la orientación sexual que no consideran importante y una falta de discreción, modestia y sumisión lo que eventualmente podría perjudicar a la moral pública, las creencias religiosas o incluso la propia causa de los derechos de los homosexuales al reivindicar demasiado alto los derechos. Proponen, en cambio, evitar un activismo estridente a fin de incorporar más fácilmente el discurso por la no diferencia de los homosexuales a las ideas comunes que marca la opinión pública. Otros críticos ven en la noción de orgullo una suerte de desprecio hacia la identidad de cada individuo, pues cada uno –incluso cada homosexual— vive su orientación sexual sin necesidad de identificarse con un estereotipo determinado y por tanto los que tienen una identidad gay deberían llevarlo más discretamente.



En España la celebración mas conocida es la que se desarrolla en el conocido barrio de Chueca de Madrid. Un fieston !!!

7 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Qué pena que tengamos que celebrar la "Semana del Orgullo Gay"!.Ninguna persona debería avergonzarse de su orientación sexual, como tampoco tiene importancia ser rubio/a o moreno/a, alto o bajo. No tendría ningún sentido hablar de "la semana de los rubios/as" para reivindicar nada. Cada uno es como es; como la naturaleza ha querido que fuera. El día que no haya que dedicarle una semana, ni un minuto siquiera, a reinvidicar el derecho que tiene todas las personas a ser tratadas por igual, con independencia de su sexualidad, de sus ideas políticas o religiosas, será señal de que los seres humanos hemos llegado a conocernos

Johupa dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Johupa dijo...

En realidad creo que no todos los gays/lesbianas estan en el armario por vergüenza, mas bien diria que en la mayoria de los casos es el miedo al "que diran" los amigos, la familia, los compañeros, etc., en definitiva: miedo al rechazo...

Supongo que todo esto pasara con el paso de las generaciones. Cuando mi generacion sea la adulta, y eduquen a las generaciones venideras tomando con total normalidad la orientacion sexual.

Anónimo dijo...

Es una lástima que el autor haya eliminado una entrada, supongo que la eminaría por ser grosera, no porque el comentario fuese contrario a su opinión; porque, si así fuese, no demostraría que es tolerante con quien piensa de otra manera. Y la tolerancia es el primer paso para poder entenderse. Aunque, la verdad, l aimagen que nos ofreció hoy la televisón de la celebración en Madrid, más que incitar a la comprensión, era una provocación, con algunas escenas de bastante mal gusto. Quiero pensar, que ser gay, lesbiana, o lo que se quiera, se aleja mucho de unas cuantas "locas" berreando por el centro de Madrid. La dignidad, es otra cosa; y lo que es más improtante, se adquiere de otra manera. El espectáculo era esperpéntico. Va a ser bastante dificil que la sociedad acepte lo que, se mire por donde se mire, raya el ridículo. ¿Es necesario vestirse de rosa o pintarse como una mona para reivindicar un derecho? No me imagino a las mujeres que se manifiestan , por ejemplo, para defender sus derechos o cualquier otra causa, disfrazadas. No me lo imagino. El camino es otro. Para que nos traten con seriedad, tenemos que ser un poco serios.

Johupa dijo...

La entrada eliminada era publicidad, por eso la elimine.
Y respecto al comentario, como ya puse en el blog, existen muchas asociaciones y colectivos, y tambien gente de la calle en contra del famoso "desfile" porque efectivamente, mas que conseguir que la gente vea la homosexualidad como algo normal, la imagen que da es de gente echando pluma por todas partes, medios desnudos, y desfasaos.
Pero la gente que hace esto es un 1% de la sociedad homosexual.
Puedes ir a chueca en estas fiestas y la gente se comporta de manera normal, civilizada, y como haria cualquiera en cualquier fiesta, exceptuando ese 1% que, averguenza a buena parte de su orientacion.

Anónimo dijo...

Johupa dice en un comentario, que cuando su generación sea adulta todo se verá con normalidad. Lo malo es que para muchos será ya deamsiado tarde. Conoz co gays y lesbianas que le echaron huevos y salieron del armario a tiempo. Las críticas, el rechazo y los comentarios duraron. lo que duraron. Ahora son ciudadanos/as normales y felices. Y conozco quien intentó varias veces suicidarse por no decirles a sus padrs que era gay. Él no es feliz, ni lo será si no sale del armario. Nada dura mucho tiempo, todo es dejar un margen de adpatación.

Carlos dijo...

La homosexualidad es una enfermedad mental. Se le da una carta de naturalidad que no tienen otras (como por ejemplo la esquizofrenia) cuya defensa se ha convertido en un negocio. Es difícil exigir un poco de decoro en la vestimenta, pongo como ejemplo la moda hortera de enseñar la ropa interior. Simplemente quiero apuntar que me parecen exageradas las exhibiciones callejeras, pero esto no es lo fundamental.
Cada uno tiene el derecho a hacer lo que quiera dentro de su casa, por supuesto siempre que no delinca. El problema de la homosexualidad aparece cuando afecta a la sociedad, como en los casos de adopción o crianza de niños por personas del mismo sexo, el mal llamado matrimonio o la concesión de derechos a causa de esta unión. ¿Los trabajadores que comparten piso cuando están desplazados pueden beneficiarse de ayudas por vivir juntos?