viernes, 11 de febrero de 2011

¿Empieza a salir del armario el machista mundo del futbol ?



El portero internacional de Alemania, Manuel Neuer, reconoce ser homosexual.

"En Alemania tenemos un ministro de exteriores -Guido Westerwelle- que es homosexual y el alcalde de Berlín -Klaus Wowereit- es también gay, por lo que los futbolistas profesionales que lo sean deberían confesarlo", declaraba el delantero internacional alemán Mario Gómez hace una semana.

Tan sólo siete días después, su compañero de selección, el guardameta Manuel Neueur, ha anunciado en la revista alemana 'Bunte' que es gay. El meta, que jugara las semifinales del Mundial ante España, se ha convertido en el primer jugador de alto nivel en hacer pública su homosexualidad.

Neuer, compañero de Raúl González y de José Manuel Jurado en el Schalke 04, es el primer futbolista profesional en gritar su condición sexual a los cuatro vientos. El guardameta alemán lo tiene claro: "Quien sea homosexual debería decirlo, ya que alivia".

De esta manera, el guardameta alemán ha roto barreras en el mundo del fútbol, uno de los deportes en los que la condición sexual siempre se ha consirado como un tema tabú. Neuer, que pronto se enfrentará con su equipo al Valencia en la Liga de Campeones, asegura que llegará a Mestalla "libre de cargas".

El meta no tiene ninguna duda al respecto de cómo le va a tratar su afición: "Los hinchas se acostumbraran rápidamente, porque en el fútbol lo que importa es el rendimiento del jugador y no sus preferencias sexuales", indicó el meta internacional alemán.

Hasta la fecha, sólo un jugador más ha reconocido ser homosexual, un caso que también se ha producido en Alemania. Su nombre es Marcus Urban, y aunque jugó en las categorías más modestas del fútbol germano, su caso se hizo célebre hace unos años tras publicar su biografía.

Va siendo hora que, en pleno siglo XXI, y siendo ya algo totalmente cotidiano el "salir del armario", en el mundo del deporte, donde poco a poco van goteando casos, se pueda decir libremente "soy gay" sin que te miren mal. Sobre todo en un deporte tan machista como el futbol.

miércoles, 9 de febrero de 2011

"La segunda hipoteca": el pensionazo obligará a los estudiantes a elegir entre formación o cotización

Estudia o revienta. A los jovenes, supuestamente mejor preparados de la historia, una generacion convertida casi en "profesionales de los apuntes", por decision propia o por impositivo de la crisis economica, el presente les ha estallado en la cara.
Por si fueran pocas las dificultades para abrirse paso a corto plazo en el mercado laboral español (no olvidemos que España tiene la mayor tasa de paro juvenil de europa, entorno a un 44%), y que organizan su vida en funcion del calendario de examenes, el porvenir se les presenta aun mas hipotecado.

La reforma del sistema de pensiones, aprobada en comun acuerdo entre gobierno, patronal y sindicatos, coloca en una situacion de riesgo a quienes, como ellos, alumnos de largo recorrido, opositores doctorandose o becarios encadenados, con contribuyen ahora mismo a la Seguridad Social. De paso, activa una terrible cuenta atras: a partir del año 2013, fecha de entrada en vigor del nuevo Acuerdo Social y Economico, que eleva la edad de jubilacion legal a los 67 años, y aumenta a 38,5 años el periodo de cotizacion para cobrar la pension completa. Con todo esto, cada dia en el paro sera una losa.

¿Hasta que punto es recomendable y psicologicamente saludable preocuparse por la cuantia de la prestacion cuando la maxima prioridad (conseguir trabajo) es mision imposible en un pais con la anteriormente citada tasa de paro juvenil?¿Procede pensar en el retiro cuando en España hay ya 1,56 millones de jovenes en la cola del INEM, el doble que hace 3 años?

Pues solo queda tomar la decision: estudiar, o cotizar.

martes, 1 de febrero de 2011

¿Somos más pobres que ayer...y menos que mañana?

Si 2009 fue el annus horribilis del empleo -se destruyeron 1,2 millones de puestos de trabajo-, el año 2010 pasará a la historia como el ejercicio en el que se registró el mayor deterioro de las condiciones laborales de la democracia, con una reducción de los salarios reales como nunca antes había sucedido desde 1977.

Y lo peor es que nada indica que 2011 vaya a significar un punto de inflexión. Todo lo contrario. Estamos rondando los 5 millones de parados. El repunte del índice de Precios de Consumo (IPC) correspondiente al mes de enero refleja que mientras los precios suben ya en tasa interanual un 3,3%, los salarios apenas avanzan un 1,3%, y no contamos la bajada del sueldo de los funcionarios.

Existe una clara pérdida de poder adquisitivo.

El ajuste en los salarios y en la calidad del empleo hay que relacionarlo con la persistencia de la crisis económica, que ha puesto al borde del abismo a muchas empresas y ha hecho crecer el paro hasta el 20,3% de la población activa.

De hecho, la remuneración por asalariado en términos de contabilidad nacional crece a ritmos del 0,5%, muy por debajo de lo que está aumentando el pib nominal (con inflación). Mientras que los costes laborales unitarios (relación entre productividad y empleo) están cayendo un 1,4% tras los fuertes incrementos de años anteriores, en los que se dañó la competitividad de la economía española.

 La moderación salarial es incluso superior si se tiene en cuenta el llamado efecto composición, toda vez que al haberse cebado los despidos en los salarios más bajos (de menor cualificación), los que suben ahora son los medios y altos, lo que introduce un sesgo alcista en las tasas de variación. Sin este efecto composición, la subida de los salarios sería todavía más reducida.

Este ajuste salarial, sin embargo, todavía no se ha trasladado con fuerza a la capacidad de competir de las empresas españolas en los mercados internacionales. Básicamente por un problema de productividad. Los datos oficiales muestran que el coste laboral unitario medido por el cociente entre la remuneración por asalariado y la productividad por ocupado se sitúa en el 76,5%. Es decir, muy por encima del 69,2% de la zona euro, hacia donde se dirige el grueso de las exportaciones españolas.

Dicho en otros términos, los salarios españoles son más bajos que en la eurozona (23.603 euros frente a 27.153 de media), pero la productividad es también sensiblemente inferior (30.859 euros frente a 39.255 en la zona del euro. Y eso está, precisamente, detrás de los bajos salarios.
Resumiendo: Los españoles vamos perdiendo poder adquisitivo. Mientras los precios suben, y estamos, mas o menos, igualados a Europa en este sentido, los salarios van a menos. Francia, Alemania, Suecia, Reino Unido, etc...tiene unos precios similares a los españoles, pero la media de sus sueldos son el doble, e incluso en triple que los de nuestro pais.
Cada día somos más pobres...y no tiene vistas de que mejore en un corto plazo.