Finalmente, la victoria de Obama ha sido inapelable: más de 60 millones de americanos le ha dado su voto y ha logrado arrebatar a los republicanos nueve de los estados en los que Bush venció en 2004. El Congreso también tendrá color demócrata en las dos cámaras. Tanto Obama como McCain han apelado a la unidad de la Nación en torno a los valores compartidos por los americanos.
Barack Obama llegará a la Casa Blanca con 349 votos electorales, lo que supone doblar a John McCain, que se ha quedado en 163.
Al principio de la noche daba la sensación de que, una vez más, las encuestas iban a fallar. Parecía que McCain aguantaba el tipo en sus estados. Los primeros datos de Indiana eran muy favorables para él. También parecía que Virginia y las dos Carolinas seguirían fieles a los republicanos. En Florida, McCain estaba por detrás pero con opciones de dar la vuelta a medida que avanzase el escrutinio.
Pero el primer jarro de agua fría para los republicanos llegó en Pennsylvania. Todas las cadenas daban por segura la victoria de Obama en un estado que se había convertido en la gran esperanza de los republicanos dentro de los considerados estados demócratas. A partir de ahí, todo fueron malas noticias para McCain. La previsión de la victoria de Obama en Ohio y Nuevo México convertía el triunfo republicano en algo parecido a un milagro.
Y no hubo milagro. Obama se ha impuesto en nueve estados de fuerte tradición republicana: (Nevada, Colorado, Nuevo México, Florida, Indiana, Iowa, Ohio, Virginia y Carolina del Norte). Por el contrario McCain no ha conseguido cambiar el sentido del voto en ninguno de los estados que hace cuatro años apoyaron a los demócratas.
Las distancia entre los dos candidatos no es tan grande en cuanto a voto popular, aunque la victoria del demócrata también ha sido holgada y, además, gracias a la alta participación llegará a la Casa Blanca siendo el presidente más votado de la historia. Así, con un más del 90 por ciento escrutado a nivel nacional, Obama tiene 61.636.953 de votos (52 por ciento) y McCain 54.861.736 de votos (47 por ciento).
El Partido Demócrata ha logrado ampliar su posición de mayoría en el Senado –este martes se renovaba un tercio de la cámara– en donde alcanzan la cifra de 56 escaños de un total de cien. En la actualidad, los demócratas cuentan con 51 escaños -incluyendo a los dos independientes que suelen votar con ellos- frente a 49 de los republicanos. En la Cámara de los Representantes que se renovaba al completo, también tendra mayoría absoluta a los demócratas con 233 escaños por 145 de los republicanos.
PD: que conste que yo era partidario de Hillary Clinton
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